Frases

“No se cambian las cosas combatiendo la realidad actual. Para cambiar algo, es necesario crear un nuevo modelo, uno distinto que haga que el actual modelo quede obsoleto".

Richard Buckminster Fuller

miércoles, 8 de abril de 2015

Coaching Ficcion a la Elite

Hay un gran colega Coach, Juan Vera, quien tiene muchos años de experiencia haciendo Coaching y en los últimos años, se ha dedicado al Coaching en Política. Yo desconozco el estilo que usa Juan con sus clientes políticos, y obviamente menos sé la forma de llevar a cabo sus sesiones, e independiente de los logros que sus clientes estén obteniendo, creo que una buena dosis de buen COACHING a los políticos y “Elite” de este país, les sería bastante favorable.

Y destaco COACHING, pues quiero dejar muy en claro, que lo que hacía Vasco Moulian con sus clientes políticos, era cualquier cosa menos Coaching (es más, por tipos como él y otros, que se autodenominan Coach, dejan la actividad muy mal parada).

Por mi parte, yo nunca le he hecho Coaching a un político, y durante mi viaje a Colombia, donde fui a facilitar un taller de Coaching con la metodología que aprendí en Harvard, de retorno a Santiago comencé a imaginar, ¿cómo sería una sesión de Coaching a la Elite chilena, imaginando que esta se personificara en un hombre, y representara a toda ese grupito que hoy, por mucha plata que tengan, se han perdido el respeto de la sociedad?

Entonces, supongamos que viene la Elite, interpretado por un hombre, a una sesión de Coaching; y que en su verdadero SER, tiene ganas de cambiar sinceramente...   ...veamos cómo podría resultar.

COACHING FICCIÓN A LA ELITE CHILENA


- Hola Elite, bienvenido a este encuentro, y te felicito por la decisión de tomar este proceso.
- Gracias, y bueno, en realidad, no sé qué tanto esto pueda servirme en realidad, fue la Sociedad la que me envió, yo por mi parte no creo necesitarlo.
- Mmm ok, es válida tu postura, y aun así, ¿te puedo hacer una pregunta?
- Sí, claro, si no tengo otra opción.
- Siempre tienes otra opción, puedes decir que no también….
- Sí, bueno, como sea…
- ¿Alguna vez te han dicho que eres un tanto arrogante?
- Mmm, creo que sí, pero en realidad no recuerdo haber pescado, así que…
- Ah ok, entiendo….  …bueno, de todos modos, vuelvo a felicitarte por al menos venir. 
Ponte cómodo, elije donde quisieras sentarte.
- Creo que tomaré el sofá más grande.
- OK, si eso te hace sentir cómodo, bien por mí.
- Sí, es como el sitial que merezco…
- OK, bien entonces. Y cuéntame, ¿sabes en que consiste el Coaching?
- La verdad no lo tengo claro, e imagino que intentarás darme consejos y directrices de cómo resolver la contingencia que está desprestigiando nuestra imagen ante la sociedad. Supongo que me darás potenciales respuestas y soluciones a esto, y generarme un Plan y Estrategia de lavado de Imagen…
- Jajaja, veo que has visto o escuchado mucho sobre las sesiones de “coaching” de Vasco Moulian y otros, jajaja. No, esto no tiene nada que ver con lo has planteado, por el contrario, yo seré una especie de “Andamiaje” que te ayudará y apoyará a que tú mismo puedas encontrar respuestas a lo que te inquieta, básicamente por medio de preguntas que te desafíen a mirar más allá de tu actual perspectiva.
- ¡Preguntas, ¿Yo no quiero preguntas, quiero soluciones rápidas y eficientes?!
- O sea, quieres más de lo mismo, soluciones técnicas para un problema que es de una índole totalmente distinta a lo que te estás viendo enfrentado, digamos que te estás frente a un Desafío Adaptativo, el cual no se resuelve con soluciones técnicas rápidas del reportorio de respuestas que ya has experimentado antes, ¡¿QUIERES CAMBIAR REALMENTE, o deseas que esto sea otra fallada más de tus malas prácticas?!

Se genera un primer gran Silencio….   …me mira con una mirada de rabia, supongo que ha de haber encontrado injusto el tono y la pregunta misma, sin embargo manteniendo el silencio, algo de culpabilidad comienza a aparecer en su rostro.

- Sí, sí quiero – responde Elite con un primer atisbo de humildad.
- Bien – respondí – Entonces, por una parte entiendo que crees no necesitar de un Coaching, y sin embargo por otra parte me indicas que sí te gustaría generar un cambio, ¿estoy comprendiendo bien?
- Sí, pienso que has comprendido bien.
- OK. Mira, tenemos una hora y tanto para dedicarle a la sesión; te propongo que conversamos y veamos cómo sacar provecho de este tiempo, ¿te parece?
- Me parece justo.
- Muy bien, comencemos entonces. Haber, acabas de declarar que sí quieres un cambio, ¿tienes claro cuál sería ese cambio?
- Mmm, la verdad es que no, como te mencionaba al inicio, creo que no necesitarlo, y a la vez declaro que quiero, un cambio, el tema es que no lo tengo claro, pues más bien en este preciso momento, solo tengo la sensación de querer buscar un cambio.
- OK, eso ya es un comienzo. A ver si con esto te ayudo un poco. Imagina que invitas a una pequeña reunión a personas o grupo de personas que te conozcas y que podrían ver un gran espacio de mejora en ti, ¿qué te dirían, qué te propondrían?
- Mmm, no me queda claro lo que me pides, pues en realidad, son pocos quienes realmente me conocen.
- Entiendo. Usamos otra vía. Así como a los gerentes y ejecutivos se les evalúa o da feedback  por medios de herramientas psicosométricas, como los 360, los Hogan Assessment, MBTI, etc, últimamente las encuestas de opinión pública han entregado ciertos resultados de cómo eres visto para la sociedad, y que en general las personas, las instituciones públicas y privadas, algo están esperando de ti, ¿qué sería eso que ellos quisieran que mejoraras?
- Mmm, no tomo en cuenta las encuestas…
- Sí, lo tengo claro, y aun así sé que estás al tanto, y por otro lado, te estoy invitando a imaginar la situación, ¿me explico?
- Sí, entiendo. A ver, déjame pensar
- Por supuesto, tómate tu tiempo y ve si puedes generar una lista de al menos 3 potenciales mejoras.

Segundo silencio de la sesión, este sí, más en un espacio reflexivo. 

Luego de unos minutos Elite comenta:
- Me parece que las tres principales opiniones y resultados de las encuesta, y por ende lo que la sociedad ve como potenciales espacios de mejora en mí, serían:
  • Dejar de ser tan corruptos e individualista.
  • No llevar y sostener un doble estándar.
  • Dejar de ser tan arrogante y todo poderoso.

- Bien, te felicito, no ha de haber sido fácil admitirlo, y si bien concuerdo bastante en estos tres punto, te invito a que los transforme con una connotación positiva; al ser en positivo, es más probable que tengas éxito en tu objetivo. Entonces, piensa nuevamente en estas 3 ideas, y llevarlas a declaraciones en positivo, ¿cómo serían, cómo quedarían?
Otros unos más en silencio, y resultado es el siguiente:

- Si comprendí bien, creo que podrían quedar así:
  1. Generar  transparencia, sinceridad, y trabajo comunitario.
  2. Desarrollar la integridad y tener un solo discurso.
  3. Desarrollar la humildad y la empatía social.

- ¡Excelente! Mucho mejor de esta manera. Entonces, te invito a que ranquees de 1 a 10, donde 1 es menos importante y 10 lo más importante, cada una de estas tres declaraciones.
- La 1, la raqueo con un 9; la 2, con un 7, y a la 3 le pongo un 6.
- OK, bien. Entonces, déjame hacerte otra pregunta antes de continuar…
- Dale…
- ¿Es esta declaración, cierta para ti, es decir, realmente crees y estimar que es algo que debes mejorar?
- Sí – responde con algo parecido a una pisca de vergüenza.
- Perfecto, y déjame preguntar algo más, ¿esta mejora, te implica a ti directamente, es decir, depende solamente de ti desarrollar el cambio?
- Bueno, supongo que sí, pues está hablando de mí, soy yo quien debería generar este cambio en particular.
- Muy bien entonces, ¿te parece que conversemos sobre “Generar  transparencia, sinceridad, y desarrollo de justicia social”, qué este sea el objetivo de esta sesión?
- Sí, me parece bien.
- OK. Entonces para comenzar, cuéntame 3 razones de por qué desarrollar este objetivo es importante para ti.
- …    …Creo que sería importante para mí, pues ayudaría a generar un clima de mayor confianza. Porque también las personas sentirían que su voz tiene relevancia y que se les toma en cuenta. Y porque servirías para vivir y trabajar de forma más armónica.
- Genial, me parece muy bien tus razones. ¿Cómo te sientas con ellas?
- Mmm, ahora que me lo preguntas, y al declararlo y volver a pensarlo, reconozco que me hacen bastante sentido, y creo que el objetivo está definido, y me motiva más a querer lograrlo.
- Perfecto, muy bien…
- …¿me vas a dar un Plan de Acción ahora?
- No, tranquilo, recién estamos empezando…
- Pero cómo, si ya tenemos claro el objetivo, ¡vamos por un plan de acción entonces!
- Jejeje, no Elite, no cometas el error que la gran mayoría realiza, de ir por soluciones técnicas, remedios y recetas ya conocidos, para un Objetivo que para ti, está siendo un real “Desafío Adaptativo”, el cual no se resuelve con un mero Plan de Acción…
- Yiaaa, y entonces, ¿qué sigue?
- Sigamos conversando un poco más
- OK, si tú lo dices…

Silencio mirando con toque desafiante a Elite, y él con algo de incomodidad.

- Mira, déjame llevarte un espacio un tanto distinto, siempre con el foco en tu objetivo. Tomate unos minutos, piensa y toma conciencia de todas las acciones que haces y no haces que van totalmente en contra de tu objetivo. Acciones, comportamientos concretos, no sentimientos ni ideas al respecto.
- No te entiendo.
- OK, no hay problema, te pongo un ejemplo. Tenía como cliente a un gerente corporativo de finanzas, que luego de una evaluación 360, se le desafió a desarrollar “mayor recepción a nuevas ideas, y aprender a delegar”. Él estaba consciente de este desafío, y real y sinceramente quería alcanzar este objetivo, sin embargo, luego de un año, no lograba conseguirlo, y fue ahí cuando entré yo a trabajar con él. Entonces, cuando le hago la pregunta que te acabado de hacer, de qué hace o no hace que atenta directamente al logro de su objetivo el me respondió: “no tomo realmente en cuenta las nuevas ideas, e incluso las escucho de forma sarcástica. No pido opiniones a mi equipo, ni tampoco indago por nuevas ideas. Doy muchas directrices y ordenes todo el tiempo. Suelo dar rápidamente opiniones, cuando quizás en realidad, no es eso lo que me piden. Y no pido ayuda ni entrego ciertas de mis actividades  a mi equipo”.  
¿Te queda claro hacia donde estoy enfocando la pregunta ahora?
- Sí, me queda claro…  …dame unos minutos para pensar.
- OK, y te desafío a que seas realmente honesto, y si quieres, puedes anotar aquí, en esta hoja,  tus ideas.
- Bien, gracias.

Silencio por unos 5 minutos.

- Ya, creo que ya estoy listo.
- Bien, a ver, léeme tu lista de acciones.
- Cuando alguien me pide información concreta, me siento incómodo. Cuando…
- A ver, a ver. Entiendo lo que me dices, y sin embargo, te pregunté otra cosa.
- ¿Cómo?
- Claro, te pedí que describieras o indicaras acciones o comportamientos concretos que atentan al logro de tu objetivo, no sentimientos ni emociones, y lo que me acabas de indicar, es un sentimiento, que obviamente viene acompañado por una emoción; ¿qué acción o comportamiento concreto viene posterior a este sentimiento?
- ¡Evado diciendo que no tengo dicha información a la mano, y que se las entregaré luego, y finalmente nunca lo hago!
- ¡ESO! Bien, a eso me refería. Esa es una mini serie de acciones concretas que van en contra de tu objetivo. OK, revisa cómo escribiste las otras ideas, y si no son acciones o comportamientos concretos, transfórmalas.
Pasan unos 10 minutos y Elite me indica,
- Bien, creo que estoy listo.
- A ver, cuéntame, léeme nuevamente, qué más haces o no haces que atenta el logro de tu objetivo.

Toma aire, suspira y bombardea:

- Me “inspiré” y realicé la siguiente lista: 
  • Le pido a mis parientes que emitan facturas o boletas de honorarios “falsas”, de modo de rebajar carga tributaria.
  • Recibo boletas y facturar “falsas” para financiar políticos.
  • Uso información privilegiada para ganar en “la pasada”.
  • Comunico que los ingresos y las utilidades están muy por debajo de lo esperado, para no tener que pagar bonos ni aumentar sueldos de mis trabajadores.
  • Pido la “raspada” de la olla.
  • Asusto con que si el gobierno toma medidas laborales y tributarias, aumentará el desempleo.
  • Pido coimas de $200.000.000 a los empresarios para legislar a favor de sus proyectos e intereses, como HidroAysen por ejemplo.
  • Me coludo con la competencia para fijar altos precios y de este modo, hacer parecer que son precios de mercado.
  • No comunico las negociaciones paralelas que hago con la otra colectividad.
  • No pago mis reales impuestos.
  • Me auto aumento las vacaciones y los sueldos.
  • Le pido a los trabajadores que hagan un esfuerzo económico, sin embargo yo sigo almorzando todos los días en restaurantes caros.
  • Ofrezco medidas e ideas populistas, sabiendo que no se llevarán a cabo o que no son buenas  medidas realmente.
    ¡Wow! – finalmente expresa.


- Sí, wow – respondo yo- ¿Qué te pasa al hacer esta lista y luego declararla en voz alta?
- Me siento un tanto aturdido, y porque no decirlo, algo avergonzado. Sin embargo podría explicar…
- No, no, no, no. No me interesan las explicaciones en este punto. Lo importante aquí, independiente de cualquier explicación o excusa, es que reflexiones que tomes conciencia de esto. Me es suficiente con que notarás que te avergüenzas en alguna medida, y que te sientas un tanto aturdido. ¿Algo más?
- No sé, más bien se me vienen preguntas…  
- ¿Cuáles?
- La principal, ¿por qué hago todo eso, si en realidad me gustaría lograr el objetivo planteado al inicio?
- Está bien, y cómo te decía, por ahora no es momento de ir a buscar esos porques, ya habrá espacio para esto. Más bien por ahora, me nace preguntarte, ¿cómo te sientes, deseas que continuemos?
- No tengo claro cómo me siento…  …mmm, mmm… ..distinto, no sé, pero quiero seguir.
- Muy bien entonces, sigamos.       A ver, hasta ahora, por una parte, has establecido un objetivo a seguir, tienes claro el por qué éste es importante para ti, además que es realmente cierto para ti, es decir, que sinceramente quieres conseguirlo, y por otra parte, te das cuenta de la cantidad de acciones o comportamientos que haces o no haces que van en contra y atentan directamente a lograr y alcanzar tu objetivo. Entonces, de esta larga lista me que me has dado, imagina que por una vez, hicieras lo totalmente opuesto a cada una de esas acciones en tu lista, ¿qué sería lo peor  y lo más terrorífico que te podría pasar?
- Mmm, si hiciera todo lo de la lista anterior, obviamente jamás podré lograr mi objetivo, obvio.
- OK, eso lo entiendo, y sin embargo, yo te hice otra pregunta.
- ¿Cómo, qué me preguntaste?
- Te dije que sería lo peor y/o lo más terrorífico que te podría pasar te hicieras lo OPUESTO a cada una de las acciones o comportamientos que señalas en tu lista…
- ¡Si hiciera lo totalmente opuesto a todo eso, perdería mi poder, mi posición, y mis privilegios! – Grito con fuerza y como desahogándose de un gran malestar interior.
- Uufff, Wow!!! – exclamé yo, y todo un abanico de nuevas visiones y perspectivas se abrieron. - ¿De qué te das cuenta de lo que acaba de ocurrir?
- No, sé, no sé.
- Vamos, reflexiona profundamente, ¿de qué te estás dando cuenta?
- De como yo mismo boicoteo por miedos y no sé, suposiciones, el alcanzar mi objetivo.
- Pareciera que hubiesen dos tipos de compromisos distintos aquí, ¿lo ves?
- No me queda claro a qué te refieres, sin embargo veo que es como si hubiera dos fuerzas distintas luchando entre ellas.
- ¡Exacto! Y en esa línea, pareciera que tienes un compromiso válido y “legal” de querer alcanzar tu objetivo, y al mismo tiempo, pareciera que tuvieses un compromiso válido e “ilegal” u oculto que compite con el otro compromiso, ¿lo ves así?
- Ahora que me lo muestras así, claro lo que veo.
- ¡Qué interesante! ¿A qué te estarás comprometiendo con ese compromiso “oculto”?
- Chuta, no sé, nunca lo había pensado…
- A ver, nuevamente, concéntrate y reflexiona sobre lo que tú mismo acabas de declarar, eso de que perderías tu poder, tu posición, y tus privilegios.
Se genera un gran silencio y al cabo de unos 5 minutos, Elite dice:
- Pareciera que en realidad mi compromiso está con mantener mi individualidad y egoísmo – y algunas lágrimas bajan por sus mejillas.
- Te felicito Elite, has dado un tremendo paso, si bien no has resuelto ni encontrando ninguna solución o respuesta que te lleven al logro de tu objetivo, algo en ti ya ha pasado que no te hace ser el mismo de hace 45 minutos atrás, ¿cómo lo ves tú?
- Mmmm, sí, yo también siento que no soy el mismo, o al menos algo distinto ha aparecido…  …no sé qué, pero ahí está.
- Y está bien, eso ya es suficiente por ahora. ¿Cómo estás, en qué estás? – le pregunto al notar su sorpresa en su rostro.
- Estoy asombrado, confundido, mareado, apenado, enrabiado, y bastante cansado.
- OK, ¿y crees que podríamos seguir un poco más?
- Sí por favor, sigamos.
- Bien. A ver. Hemos llegado a un tercer punto, el que claramente existen compromisos ocultos que compiten con tu compromiso que está a favor de alcanzar tu objetivo; me pregunto entonces, ¿qué será aquello que te lleva a tener esos compromisos ocultos, que supuestos, creencias, o juicios habrán que alimentan la necesidad de tener dichos compromisos ocultos?
- Mmm, sorry, pero a estas alturas estoy un tanto aturdido con todo lo acontecido en esta sesión.
- Perdón, discúlpame.
- Sí, tranquilo.
- Mira, me refiero a que te preguntes, ¿qué estarás asumiendo o suponiendo como cierto que si no haces?

Unos 3 minutos de silencio y, Elite con la cabeza gacha, como escondiendo su vergüenza, enumera una lista de supuestos:
  • Asumo que para ser éxito y tener privilegios, es absolutamente necesario pasar a llevar las buenas prácticas, las normas legales, e incluso si es necesario, romper las confianzas. 
  • Asumo que para mostrar mi poder, he de hacer todo lo necesario para mantenerlo y no perderlo, cueste lo que cueste.
  • Asumo que para mantener mi posición en la Sociedad, incluso debo ejecutar prácticas “oscuras”.
  • Asumo que si soy justo, empático, e igualitario con las sociedad, ellos querrán tomar mi lugar, mis privilegios, mis garantías….  …en definitiva, mi vida llena de comodidades.
  • Asumo que si abogo por trabajar comunitariamente, tendré que dar tanto o más que recibir, que tendré que servir a otros, en vez que ellos me sirvan a mí, que tendré que trabajar con otros, en vez que ellos trabajen para mí.


Elite, por primera vez, y por unos instantes, deja su máscara, su armadura, y expresa su autenticidad, apareciendo el Ser Interior Oculto que demanda Transparencia, Sinceridad y Trabajar en Comunidad. 

Lo abrazo un par de segundos, luego me sonríe, me agradece, y le digo:

- Creo que es suficiente por hoy.
- ¿Cómo seguimos? – me pregunta él.
- Tranquilo, ya seguiremos en contacto muy pronto.