Frases

“No se cambian las cosas combatiendo la realidad actual. Para cambiar algo, es necesario crear un nuevo modelo, uno distinto que haga que el actual modelo quede obsoleto".

Richard Buckminster Fuller

sábado, 11 de junio de 2011

Soplar los fuegos internos de los hijos

Para mí, Coco Legrand es el Coach Social N° 1, con una capacidad aguda de observación y de sacarnos de las distintas transparencias en que vivimos como sociedad, por medio del humor. Y no solo de humor, sino a través de la irreverencia. Y como nosotros le damos la autoridad para que sea irreverente, aprovecha ese activo personal, para contarnos cosas tales como que el único animal de la selva capaz de ir a apagar los incendios, es el Rinoceronte, pues tiene un grosor de piel suficiente para hacer aquello; Legrand usa eso como metáfora para decir que en Chile (y el mundo diría yo), está lleno de tipos con espíritu de rinocerontes: ¡huevones apagadores de fuegos internos! El Coco dice, “parten apagando los fuegos internos de sus conyugues, luego los fuegos internos de sus hijos: ‘cómo va a ser artista, mejor que estudie leyes, y que luego vea’, creando a otro hombre/mujer infeliz”.

Y si hay algo que me empelote, es que le “corten las alas” y los sueños a un niño o niña, apagando su fuego interno, destruyendo sus sueños, su creatividad y su inocencia, porque a juicio de los padres (juicio maestro tomado de la sociedad en realidad), esos sueños (ser artista, deportista, profesor, entre otros) les significarían miseria económica, llenando al pobre niño de miedos, inseguridades y frustraciones.

Una amiga contaba como a su hija en el colegio, los profesores estaban “chatos” por la “actitud artística” de la niña, etiquetándola de estudiante con déficit atencional. Me pregunto, ¿sabrán ellos la maravillosa historia de la bailarina y coreógrafa inglesa creadora del musical “Cats”, Gillian Lynne, quien cuando pequeña la acusaban de no poner atención y no cumplir los estándares académicos que tenía su colegio?

La madre de Gillian Lynne, preocupaba por los dichos del colegio, la llevó al psiquiatra de la época. Tras escuchar a la madre, el doctor le dijo a Gillian que necesitaba hablar en privado con su madre un momento y ambos salieron del gabinete. El doctor le pidió a la madre que observase lo que la niña hacía mientras estaba sola, y así vio que estaba bailando una canción que sonaba en la radio del gabinete. Tras observarla por varios minutos, el doctor hizo notar como Gillian era capaz de prestar atención a la música y concentrarse en seguir su ritmo, por lo que recomendó a la madre que la apuntase a una escuela de danza.

Según declaró Gillian, muchos años después de haber comenzado a ir a la escuela de danza, "fue maravilloso encontrarse con tanta gente que no podía estar quieta y necesitaba moverse para pensar".

Afortunadamente para Gillian Lynne, su madre no apagó su fuego interno.

La pregunta qué me nace es, ¿qué necesitan los padres de hoy para no tener miedo a soplar las brasas internas de sus hijos y apoyarlos en cumplir sus sueños? ¿Qué necesitan los profesores para no apagar las brasas de sus alumnos? ¿Qué necesitamos todos para soplar las brasas, no solo de los niños, sino de todos quienes nos rodean?

Cuando hablo de esto con amigos, me dicen, “para ti que no tienes hijos es refácil decirlo”. Es verdad, no tengo hijos, pero sí fui niño e hijo…

…y no condeno a los padres tampoco; en definitiva son parte del sistema, y como la gran mayoría, hacen lo posible por encajar en él.

Por eso vuelvo a repetir, ¿qué necesitan los padres para soplar sin miedo, los fuegos internos de sus hijos?

Quizás entre todos, podemos darnos una mano, y comenzar a vivir desde la Confianza y no desde el Miedo.


PD: Vean el video que adjunto: lo comprimí a la parte relevante para el post.


Si tienen problemas para verlo, pueden hacerlo AQUI