En este camino de encuentro y búsqueda con mi YO Interior, me he dado cuenta respecto de cómo me presento frente a las distintas situaciones que se nos aparecen en la vida. Con esto en mente, no solo me he observado a mí mismo, sino también a mi entorno, y he podido distinguir que básicamente existen dos grandes tipos de personas:
Grupo 1: Las que esperan que las cosas les pasen y,
Grupo 2: Las que actúan para que las cosas pasen.
Luego, la pregunta es, ¿en cuál de estos dos tipos de grupo de personas estoy? ¿en cuál me gustaría estar?
Si bien estás dos preguntas parecen ser bastantes sencillas de responder, el hacerlo, toma mucho coraje y autocrítica, pues en mi caso al menos, claramente he estado en medio del Grupo 1, y me temo que la gran mayoría de las personas se encuentran en este grupo.
Obviamente, dado lo anterior, y como parte de mi aprendizaje hacia el autoliderazgo, mi objetivo es pasar al grupo 2, al grupo de personas que hace cosas, o por lo menos, pretendo comenzar por intenta hacer algo para que las cosas pasen.
Ahora, ¿cómo hacer para que pasen las cosas que quiero? Llevo el análisis a compararlo con querer ofrecer un producto o servicio, y de esto, desprendo lo más interesante: Ofrecer.
¿Qué ofrezco, cómo me ofrezco, y cuánto ofrezco de mí a la vida y al mundo? ¿Qué "Oferta" soy yo para las personas que me rodean, para mi familia, mis amigos, compañeros de trabajo, vecinos, clientes, proveedores, o para la sociedad en general? ¿Es mi oferta atractiva para que se generen los cambios que me gustarían que ocurriesen? ¿Soy yo una oferta atractiva para mi mujer, le doy a ella lo mejor de mí? ¿Soy yo una oferta seductora para mi empleador, que me les sea un aporte y al mismo tiempo me permita crecer dentro de la empresa?
Te invito a reflexionar, ¿qué tipo de oferta de eres para el mundo? Para quienes son padres, ¿qué tipo de oferta son para sus hijos?
Grupo 1: Las que esperan que las cosas les pasen y,
Grupo 2: Las que actúan para que las cosas pasen.
Luego, la pregunta es, ¿en cuál de estos dos tipos de grupo de personas estoy? ¿en cuál me gustaría estar?
Si bien estás dos preguntas parecen ser bastantes sencillas de responder, el hacerlo, toma mucho coraje y autocrítica, pues en mi caso al menos, claramente he estado en medio del Grupo 1, y me temo que la gran mayoría de las personas se encuentran en este grupo.
Obviamente, dado lo anterior, y como parte de mi aprendizaje hacia el autoliderazgo, mi objetivo es pasar al grupo 2, al grupo de personas que hace cosas, o por lo menos, pretendo comenzar por intenta hacer algo para que las cosas pasen.
Ahora, ¿cómo hacer para que pasen las cosas que quiero? Llevo el análisis a compararlo con querer ofrecer un producto o servicio, y de esto, desprendo lo más interesante: Ofrecer.
¿Qué ofrezco, cómo me ofrezco, y cuánto ofrezco de mí a la vida y al mundo? ¿Qué "Oferta" soy yo para las personas que me rodean, para mi familia, mis amigos, compañeros de trabajo, vecinos, clientes, proveedores, o para la sociedad en general? ¿Es mi oferta atractiva para que se generen los cambios que me gustarían que ocurriesen? ¿Soy yo una oferta atractiva para mi mujer, le doy a ella lo mejor de mí? ¿Soy yo una oferta seductora para mi empleador, que me les sea un aporte y al mismo tiempo me permita crecer dentro de la empresa?
Te invito a reflexionar, ¿qué tipo de oferta de eres para el mundo? Para quienes son padres, ¿qué tipo de oferta son para sus hijos?
2 comentarios:
...mmm, buen reflexión.
Me parece que es más cómodo tomar la postura 1, por eso sería que hay más gente en ese grupo.
Interesante pensamiento.
pero su respuesta más que ser una "frase" determinada, a mi juicio, es una tránsito natural que las personas debrían realizar a lo largo de su vida.
Todos comenzamos por defecto en el grupo uno. pero la intención de pasar al 2 es algo que se va desarrollando.
Educar, o simplemente guiar el tránsito, es una labor interna.
A menudo es posible ver los ejemplos de tal o cual "emprendedor", que con una buena idea logró hacer fortuna. pero dónde se genera el nicho creativo...
Posiblemente pasar de un grupo a otro tenga tantas variables que lo producen que sea muy largo de listar, pero en resumen evidentemente la solución pasa como todo en la vida...
SABER QUE SE TIENE LA NECESIDAD...
Hacer la reflexión sobre el grupo es un gran primer paso...
La invitación que sigue tras la pregunta es... MUEVETE.
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