Gestión de las emociones y la incertidumbre desde la mirada del Liderazgo Adaptativo y de Daniel Kahnemann

El mundo o ámbito de las inversiones es un lugar donde la incertidumbre es la norma y donde la volatilidad es la constante y la toma de decisiones es un proceso que requiere ciertas habilidades y estrategias específicas, principalmente, como decía, por el aumenro en la incertidumbre, la cual gatilla emociones y estados emocionales. En este sentido, la gestión de las emociones es fundamental para cualquier inversionista que desee tener éxito en este contexto.

En mi experiencia como consultor y coach organizacional, acompañando líderes e inversionistas, he visto cómo la incertidumbre puede generar emociones tales como el miedo, la ansiedad, la rabia y estrés en ellos. Y también he visto cómo gestionar de forma efectiva dichas emociones puede ser la clave para tomar decisiones efectivas en momentos de incertidumbre al momento de invertir.

Desde la mirada del Liderazgo Adaptativo, de Ronald Heifetz y Marty Linsky, del cual tanto he hablado en este blog, puede ser una herramienta valiosa para los inversionistas. Según Heifetz y Linsky, el liderazgo adaptativo se centra en la capacidad de los líderes para reconocer y abordar los problemas complejos y cambiantes que enfrentan las organizaciones. Esto implica desarrollar habilidades para manejar las emociones y las tensiones que surgen en situaciones de incertidumbre.Entonces, así como esto aplica para los líderes, lo mismo aplica para los inversionistas.

La diferencia está en que en el mundo de las inversionistas, sobretodo los inversionistas "retail", desde la filosofía del liderazgo adaptativo (la capacidad de movilizar a las personas en escenarios de incertidumbre para que enfrenten problemas difíciles, haciéndolos parte del problema y responsables de la solución), a la persona que hay que movilizar, es a uno mismo, y eso requiere el desarrollo de ciertas habilidades. 

En línea con lo anterior, los estudios del premio Nobel de Economía Daniel Kahnemann sobre la toma de decisiones en situaciones de incertidumbre pueden ser especialmente relevantes para los inversionistas. Kahnemann demostró que las personas tienden a tomar decisiones basadas en heurísticas, que son reglas mentales simplificadas que nos ayudan a tomar decisiones rápida y eficientemente. Sin embargo, a menudo estas reglas pueden llevar a errores y malas decisiones sobre todo, en escenarios de incertidumbre.

En el libro "Thinking, Fast and Slow" (Pensar rápido y lento), Kahnemann describe varias heurísticas que pueden influir en nuestras decisiones. A continuación, te presento algunas de las más comunes:

1. La regla de la anchura: Cuando evaluamos la probabilidad de un evento, tendemos a sobreestimar la importancia de la información que nos proporciona y a subestimar la importancia de la información que no nos proporciona.
2. La regla de la representatividad: Cuando evaluamos la probabilidad de un evento, tendemos a sobreestimar la importancia de la información que nos proporciona y a subestimar la importancia de la información que no nos proporciona.
3. La regla de la disponibilidad: Cuando evaluamos la probabilidad de un evento, tendemos a sobreestimar la importancia de la información que nos proporciona y a subestimar la importancia de la información que no nos proporciona.
4. La regla de la confirmación: Cuando evaluamos la probabilidad de un evento, tendemos a sobreestimar la importancia de la información que nos proporciona y a subestimar la importancia de la información que no nos proporciona.
5. La regla de la anclaje: Cuando evaluamos la probabilidad de un evento, tendemos a sobreestimar la importancia de la información que nos proporciona y a subestimar la importancia de la información que no nos proporciona.

Estas heurísticas pueden llevar a errores y malas decisiones en situaciones de incertidumbre, como en el mundo de las inversiones. Por ejemplo, un inversor o inversionista que se basa en la regla de la anchura puede sobreestimar la probabilidad de un aumento en el valor de una acción y tomar una decisión que no es informada.

Para evitar estos errores, es importante reconocer y abordar las heurísticas que pueden influir en nuestras decisiones. Esto puede incluir considerar información adicional y diversa para tomar decisiones más informadas.

Luego, para abordar este desafío, los inversionistas deben desarrollar habilidades para gestionar las emociones y las tensiones que surgen en situaciones de incertidumbre. Esto puede incluir:

1. Reconocer y aceptar las emociones: Es importante tomar conciencia de las emociones que surgen en situaciones de incertidumbre, y aceptar que estás aparecen, en lugar de intentar reprimir o negarlas.
   
   
2. Desarrollar habilidades de mindfulness: El mindfulness puede ayudar a los inversionistas a desarrollar una mayor conciencia de sus emociones y pensamientos, lo que puede llevar a decisiones más informadas y efectivas.
   
   
3. Fomentar la comunicación abierta: La comunicación abierta y honesta puede ayudar a reducir las tensiones y las emociones negativas que surgen en situaciones de incertidumbre.
   
   
4. Desarrollar habilidades de resolución de conflictos: La resolución de conflictos es fundamental en situaciones de incertidumbre, y los inversores deben desarrollar habilidades para manejar las emociones y las tensiones que surgen en estos conflictos.

En resumen, la gestión de las emociones es fundamental para cualquier inversionista que desee tener éxitot. Los inversores deben desarrollar habilidades para reconocer y abordar las emociones y las tensiones que surgen en situaciones de incertidumbre, y fomentar la comunicación abierta y la resolución de conflictos. Al hacerlo, pueden tomar decisiones más informadas y efectivas, y construir portafolios de inversión más sólidos y rentables.