Frases

“No se cambian las cosas combatiendo la realidad actual. Para cambiar algo, es necesario crear un nuevo modelo, uno distinto que haga que el actual modelo quede obsoleto".

Richard Buckminster Fuller

martes, 5 de enero de 2010

Cambio en el Modelo (Parte I): El Señor de la Querencia v/s Google

A mediados de diciembre, junto a una de mis socias en InsideOut, fuimos a plantear a una prestigiosa universidad del país, nuestra visión sobre por qué se debe generar un nuevo modelo de gestión al interior de las organizaciones. Si bien las personas estaban escépticas, y que varias estaban reticentes a creer que en Chile se pueda desarrollar un cambio como ese, me alegré mucho que otros pocos encontraran interesante esta nueva visión.

Así, yo exponía que El Modelo “Tradicional” de Gestión (MTG), desarrollado bajo en el Paradigma Cartesiano, donde básicamente se entiende al mundo como una suma de individualidades, es decir, es un paradigma que divide y que no integra, y que ha fomentando en los seres humanos el individualismo, llevando así a creer que el pensamiento individual es la “verdad” (primero pienso, luego existo decía Descartes), está en crisis.

El MTG se sustenta en el Miedo, por lo que es impositivo y coercitivo, que lleva a ser dirigido por el Mando y el Control, donde la figura del Gerente o Jefe “Capataz” es su ícono. Este modelo fue muy exitoso en períodos de relativa estabilidad, pocos cambios y baja incertidumbre, y donde predominaba el trabajo manual. Dada la alta estabilidad, es un modelo enfocado en lo técnico y no en lo adaptativo, fija estándares máximos, no da espacio para el error, y por ende, menos a la innovación y creatividad. El trabajo de cada persona se ve de manera separada y no integrada un todo.

F. Taylor lo desarrolló muy bien y de manera científica, generando la llamada “Organización Científica del Trabajo”, entre los años 1978 y 1903. En Latinoamérica, la figura de este Jefe o Gerente Capataz, quedó bien ilustrada en la serie “El Señor de la Querencia” de TVN, donde los peones lo único que tenían que hacer, era cumplir con sus tareas individuales y cumplir los estándares determinados para ella, supervisados por un capataz autoritario, y muchas veces, tirano, sin tener opción alguna a dar sus opiniones.

Sin embargo, si bien este modelo fue bastante exitoso hasta hace unos 30 años, el mundo dejó de vivir en escenarios de estabilidad, y por el contrario, son tan grandes y rápidos los cambios en los que vivimos, que ahora la consigna es la incertidumbre, y ante estos escenarios, el TGM ya no está siendo ni útil, ni práctico, ni productivo. El modelo está en crisis, y al igual que en la política, se requiere de un cambio.

Por otra parte, si antes el trabajo manual significaba un 90%, hoy tan solo representa un 20%. El tipo de trabajo que hoy predomina es el del conocimiento. Esto ha hecho que muchas veces los subalternos tengan mayor expertise que sus jefes, y que la tarea de un trabajador ya no solo sea individual, sino que hoy es la suma de: su tarea específica + las actividades de coordinación con otros + el aprendizaje continuo.

Dado lo anterior, un Nuevo Modelo de Gestión (NMG), a diferencia del MTG que tiene su foco en lo técnico, debería tener foco en lo adaptativo y en el aprendizaje continuo, debería estar sustentado en la Confianza y no en el Miedo. Debe ser un modelo que no fija estándares máximos, sino mínimos, dando espacio a legitimisar el error como vía de aprendizaje, innovación, creatividad y adaptación, y otra gran diferencia con el TGM, es que hoy se requiere integrar y no dividir.

Ante esta nueva realidad, los jefes se han transformado en el mayor obstáculo de desarrollo para los empleados, por lo tanto la visión del Jefe Capaz debería desaparecer, para dar paso a un nuevo tipo de jefe o gerente; uno capaz de generar los espacios emocionales adecuados para el desarrollo de las ideas, uno capaz de relacionarse de manera horizontal, independiente de los cargos, en definitiva, se requiere de un gerente que sea un agente conversacional: un agente de intervención que, usando el poder de sus conversaciones, sea capaz de disolver obstáculos y conducir a sus equipos y a las organizaciones, por la senda que les permitirá resolver los nuevos desafíos.

Un NMG ha se sustentarse en el tipo de relaciones que existen al interior de las organizaciones y en los equipos de trabajo, en destinar tiempo a potenciar las fortalezas de las personas, y en generar los ambientes emocionales adecuados para desarrollar conectividad, aprendizaje y autogestión.

Y así como “El Señor de la Querencia” simboliza al MTG, empresas como Google donde se da libertad de acción a los empleados, es el tipo de organizaciones que ya abandonaron hace rato al MTG.


Y sí, entiendo que Chile no es Silicom Valley, pero, ¿por qué no podemos aspirar a ello?

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