Frases

“No se cambian las cosas combatiendo la realidad actual. Para cambiar algo, es necesario crear un nuevo modelo, uno distinto que haga que el actual modelo quede obsoleto".

Richard Buckminster Fuller

domingo, 13 de marzo de 2016

¿De qué nos separamos cuando nos separamos, y qué hace que nos mantengamos en una relación?

Hace unos días me enteré de la tristeza noticia que un matrimonio muy cercano y querido se separó, y dentro de lo mucho que la situación me ha llevado a reflexionar, me acordé de una pregunta que le escuché a mi estimado colega Adolfo Valderrama, que hablando sobre las parejas y los divorcios él nos pregunta, "¿De qué nos separamos cuando nos separamos?

Creoo que esta es una pregunta, como diríamos en Coaching, muy poderosa, pues quizás me parece que sería muy bueno que las parejas se la hicieran antes de tomar una decisión así, y no lo digo porque esté defendiendo el matrimonio o porque esté en contra de las separaciones, sino más bien para explorar una posibilidad alternativa antes de tomar, sea la que sea la decisión, teniendo ambos claro el motivo de ésta.
Más importante aun, cual será la emoción o estado emocional que gatilló dicha decisión, recuerden que las emociones nos predisponen a tomar acciones. 

Del mismo modo, luego me pregunté, "¿y qué será que hace que las parejas se mantengan juntas?"
Me parece que es una pregunta aun más poderosa, pues creo que muchas veces, las parejas no se mantienen por lo que supuéstamente se unieron, por Amor, sino que en mi experiencia como Coach, a veces es por todo lo contrario, por Miedo.

El miedo es una emoción, que como toda emoción, es gatillada por algún suceso (entiendo por suceso, incluso un pensamiento). 
Generalmente, detrás de cada miedo, existe un juicio de pérdida, es decir, dada tal situación, me da miedo dado lo que juzgo que dicha situación me puede llegar a hacer perder. 

Por ejemplo, no me separo, pues juzgo que si lo hago, pierdo estabilidad económica, y eso hace que me de Miedo. O, no me separo, pues juzgo que si lo hago, seré catalogado como el "malo(a)", y por lo tanto temo perder mi imagen de persona "buena".

En fin, son muchos los motivos por los cuales, las parejas se mantienen juntas, y muchos por las que se separan, y me parece que en ambos casos, en un gran porcentaje, no tienen claro el porque.

Finalmente, me parece que independiente si estamos frente a una situación de separación o de conservación de una relación, a mi juicio, lo más bonito, sería que la decisión en ambos casos, estuviese basada en el Amor y no en el Miedo.

De igual forma, y como anexo a todo lo anterior, ojalá las decisiones en las empresas se tomaran basadas en el Amor, y no por Miedo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias Yoyo por traer esa pregunta que no hicimos una vez con mi compañera Angela María Peña. Era justamente en el contexto de un taller para que separados resignificaran su separación y se ayudaran a si mismos a cerrar ciclos emocionales, sin apuros. Me preguntaba qué aspecto del AMOR hace que nos separemos, ¿cómo tomamos la decisión de separarnos desde el amor? Y no creo que en la mayoría de los casos se de en "plural". Veo difícil que ambos se pongan de acuerdo a cómo separarse desde el amor. Normalmente, uno toma la decisión de hacerlo y el otro lo lamenta, lo sufre, lo llora. Y allí, la única instancia de Amor que siento nos hace separarnos (cuando no hay terceros involucrados) es el amor a nosotros mismos. Muchas veces esa falta de amor nos hace negarnos por un "bien" superior relacionado a no "romper" la familia, el cuidad a los niños y/o no dejar a la pareja de "tu vida" por el dolor que le puedes propiciar. Y es es el punto, creo yo. Lo terrible que es vivir acompañadamente solos, negándonos a nosotros mismos por el "sacrificio" que "debemos" hacer por otros. Es no impide que tratemos de salvar lo que deseemos salvar. Sin embargo, quedarse allí por miedo es la peor de las alternativas a mi juicio. La pregunta grandota, a mi juicio, es preguntarnos que es lo que más valoramos "conservar" en nuestra vidas. Perdón, esta pregunta es definitivamente en singular. ¿Qué deseo yo conservar en mi vida? Y si te has estado negando... por el deber de estar ahí, de pronto es el momento de amarte un poco más a ti mismo y actuar acorde. Adolfo Valderrama Porter ---