En 2015, se entregaron los resultados del "Programa de Desarrollo de Adultos" de Harvard, investigación y estudio que tomó 75 años de trabajo, y dirigido por parte de Robert Waldinger, Director de la Escuela de Desarrollo de Adultos de la misma Universidad.
Durante estos 75 años, se evaluaron personas tanto ricas como humildes del estado de Massachusetts, pudieron analizar 3 generaciones e incluso hubo algunos casos de hasta 4 generaciones, cuya gran conclusión fue, que la Felicidad, no depende, ni del Dinero, ni de la fama, sino de contar y tener relaciones humanas saludables y constructivas.
Hoy, cuando Waldinger pregunta a los jóvenes qué se necesita para ser feliz, el 80% responder el dinero. Luego la pregunta que se hicieron fue, ¿qué pasa, que a pesar que los resultados muestran que no es el dinero si no las relaciones de afecto, aprecio, cariño y amor entre las personas las que realmente producen y generan la felicidad, aun así la gente responde que el dinero sería el gran generador?
La respuesta fue contundente, por que el establecer relaciones humanas saludables y constructivas, requieren e implican tiempo, esfuerzo, trabajo, inteligencia racional y emocional, tener grandes virtudes humanas como la generosidad, el perdón, la paciencia, la compasión, y el amor.
Quien desee saber más sobre este estudio, les comparto el siguiente link: 75 años de estudios
Ahora, a juicio personal, comparto muchísimo lo expuesto en este estudio, y podría agregar ciertos matices de acuerdo a otras investigaciones, sin embargo en lo esencial, estoy muy de acuerdo, y por lo tanto, solo quisiera agregar mi observación que a mi juicio, complementa la respuesta anterior.
Hablando de Harvard, allá aprendí, de parte de los profesores Ronald Heifetz y Marty Linsky, una distinción maravillosa , que quienes me conocen, saben que la promuevo, promociono, y enseño todo el tiempo; la diferencia entre Problemas/Soluciones Técnicos y Desafíos Adaptativos.
Por "Problemas/Soluciones Técnicos" me refiero a todas aquellas situaciones para las cuales se tiene una respuesta conocida. Por ejemplo, se te echa a perder el auto, la solución técnica es llevarlo al mecánico. Se te pica una muela, la solución técnica es ir al dentista, y así, podría mencionar infinitos ejemplos.
Las Soluciones Técnicas son de mucho valor, pues nos permiten optimizar tiempos y resolver las situaciones de manera rápida y oportuna, el inconveniente está, cuando queremos utilizarlas ante situaciones para las cuales no son realmente una solución o respuesta, pero que sin embargo, creemos que como es lo que conocemos, es lo que debemos hacer.
Por ejemplo, una persona obesa, que quiere adelgazar, la solución técnica más eficiente, es un banda en el estómago, o un bypass gástrico. La persona es intervenida quirúrgicamente, y claro, al reducirle el estómago, tendrá menos apetito, lo cual hará que coma menos, y por lo tanto, baje de peso. Suena perfecto, rápido, y eficiente. Sin embargo, Robert Kegan, otro profesor de Harvard, experto en temas de obesidad, indica que el 95% de las personas que utiliza alguna solución técnica (conocida) para bajar de peso, a los 6 meses no solo a vuelto a ganar el peso perdido, sino que en el 85% de esos casos, incluso aumentan.
¿Qué está pasando ahí entonces? Dichas personas quisieron resolver un "Desafío Adaptativo", por medio de una Solución Técnica.
Ahora, ¿ a qué me refiero con Desafío Adaptativo? A todo aquello que implica cambiar los hábitos, conductas, comportamientos, creencias, e incluso en algunos casos, hasta valores.
Si tomamos la obesidad como ejemplo nuevamente, ese 95% de personas antes mencionadas, que volvieron a ganar el peso perdido, lo hicieron pues no se adaptaron a su nueva condición de "delgados", la cual requería de cambiar sus hábitos y conductas alimenticias, requerían de comenzar a realizar alguna actividad física y dejar de lado sus comportamientos sedentarios, y en varios casos, romper con la creencia que hagan lo que hagan, siempre serán gordos.
Desafíos Adaptativos tenemos infinitos, tan solo basta con ver con las soluciones que ofrecen los políticos en temas de salud y educación, son todas técnicas, y ni hablar de los políticos mismos, los cuales se aferran a sus conocidas tácticas y técnicas.
Ahora, volviendo a poner el foco en la Felicidad, y dado que esta se logra al tener Relaciones Humanas Saludables y Constructivas, y como indica el propio estudio de Waldinger, estás implican dedicar tiempo, esfuerzo, trabajo, inteligencia racional y emocional, tener grandes virtudes humanas como la generosidad, el perdón, la paciencia, la compasión, y el amor, es decir, la Felicidad, a mi juicio, es un tremendo y gran Desafío Adaptativo.
Implica romper la creencia de no tener tiempo para desarrollar este tipo de relaciones, o la creencia que las personas no cambian, o la gran creencia que el dinero les dará la felicidad.
Implica cambiar hábitos relacionales y aprender competencias tales como el escuchar, y el brindar Presencia Presente.
Implica generar los comportamientos de paciencia y compasión.
Implica aprender a Perdonar de verdad, entendiendo que al perdón como un acto liberador, por lo tanto, generador de felicidad.
Implica aprender a Agradecer y desarrollar el estado emocional del agradecimiento.
Implica cambiar el estado emocional basado en el miedo, a uno sostenido en la Confianza.
Y lo más importante de todo, sacar el Amor que todos llevamos dentro, entendiendo el amor como aquel romanticismo o el estado de enamoramiento que nos han enseñado se supone que se requiere para amar, sino como acciones concretas tales como el respetar al otro, el no hacer mal, el no enjuiciar, el aplicar todas las implicancias antes mencionadas, y fundamentalmente y más importante de todos, desarrollar, nutrir y cuidar el Amor Propio.
La Felicidad es un Desafío Adaptativo, pues no se resuelve técnicamente con 10 millones de dólares en la cuenta corriente; sí, servirá de mucho, y generará un efecto parecido al de las drogas, de un éxtasis y goce extraordinario, pero que como todo efecto, luego pasara. Si a esos 10 millones de dólares no se le agregan cambios de conductas, comportamientos, creencias, y en muchos casos, valores, tarde o temprano esa falsa felicidad aparecerá. Y dejo en claro que no tengo nada con que alguien tenga o se gane esos 10 millones de dólares, es más, a mí también me encantaría tenerlos, sin embargo, el punto que intento mostrar es otro.
A los alumnos de Ingeniería Comercial que he tenido, les he hecho el siguiente ejercicio, y que si se animan, háganlo ustedes mismos.
El ejercicio es el siguiente:
1. Les pregunto ¿Que necesitarían para ser felices, 1 millón de dolares, una casa preciosa en la playa, un Ferrari, qué? Piénsenlo un momento.
2. A continuación en plenario, cada uno da su respuesta. La más típica, 1 millón de dólares.
3. Luego, les hago otra pregunta: ¿Qué hace que eso los haría felices? Piénsenlo un momento.
4. Nuevamente respuestas en plenario. Algunas respuestas que aparecen ante el 1 millón de dólares son: Me permitiría tener seguridad económica. Podría comprar todo lo que quiero. Podría ayudar a mucha gente.
5. Entonces les pregunto, "OK, tomando en cuenta sus respuestas, piensen ¿para qué quieren o qué conseguirían con ello?
6. Respuestas más comunes: Tranquilidad y Paz Mental, para satisfacer mis necesidades y deseos, para que las personas y yo estemos contentos.
7. Sigo, por medio de preguntas, profundizando en el para qué y qué conseguirían con dichas respuestas.
8. En resumen, en la mayoría de los casos, se llega a que todos desean tener relaciones afectivas y que eso, los haría felices. Que estar en familia y con amigos verdaderos, los haría felices.
9. Entonces a continuación les pregunto: "OK, entonces, ¿necesitan 1 millón de dólares (o lo que sea que cada uno pensó originalmente) para tener ese tipo de relaciones?
Les dejo la pregunta a ustedes también.
Finalmente, sé que romper la creencia que el dinero hace la felicidad (o como muchos me dicen, pucha que que ayuda a comprarla), es uno de los mayores desafíos adaptativos que tenemos como sociedad, y a la espera de obtener ese millón de dólares, o lo que sea crees que te hará feliz, te invito a que en el camino, desarrolles relaciones humanas basadas en los afectos, el cariño, el aprecio, la confianza, la paciencia, el respeto, la gestión emocional, y el Amor.
2 comentarios:
Hola Rodrigo, gusto en saludarte después de tanto tiempo. Interesante el planteamiento, no me refiero al diagnostico al que llega el estudio de Harvard, uno puede intuir una conclusión similar al conversar con personas mayores y bien vividas, que ya tuvieron todas éstas ideas, expectativas, decepciones y vienen de vuelta quedándose con lo realmente importante y gratificante que les ofreció la vida o pudieron tomar de ella. Lo que encuentro interesante, es la sugerencia respecto del "como" acercarse a esas relaciones satisfactorias y fuentes de felicidad o de bienestar emocional al menos.
Creo como tú, que el modelo del liderazgo adaptativo es un poderoso concepto, aplicable a múltiples ámbitos, incluso por ejemplo a nivel de vida familiar, para conducir, guiar a tus hijos, etc. Hoy por hoy nos mata la incertidumbre, el marco de referencia basado en las cosas, bienes, en lo que debemos mostrar, en lo que los chicos deben estudiar para ser un profesional, trabajar en una buena empresa y así con una larga y cuestionable lista que no sabemos si podremos cumplir, ni si los hará felices, etc., que lata más grande, enseño a mis hijas a arreglárselas con poco, forzar su creatividad, habilidad para los negocios y manejo financiero, -la menor tiene 9 años- pero en ningún caso que estudien para trabajar toda su vida para alguien en una pseudo exitosa carrera, si eso las hace felices ya será cosa de ellas, pero no será su marco de referencia, bueno al menos ya derribe un paradigma dominante en el ámbito de mayor importancia, el de mi familia. Un abrazo, Alejandro Fortabat.
Alejandro,
Muchas gracias por tu generoso y bien expresado comentario.
Otro abrazo afectuoso para ti.
Rodrigo
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