"¿Por qué?", le pregunté.
"Porque siento que siempre podría hacer todo mejor y me da rabia conmigo misma cuando veo que así podría haber sido", me respondió.
"A ver, tú que eres tan matea entonces (le dije con un toque de irreverencia), corporalmente, ¿dónde dirías que sientes eso?", le pregunté.
Un breve silencio, la dejó ahí, y me responde, "en la parte baje de la espalda y en el estómago".
"¿Qué te lleva a sentirlo en el estómago y qué en la parte baja de la espalda?, pregunté nuevamente.
"Mmm, la rabia la siento en el estómago... ...y en la espalda.... - se queda en silencio y hace un pequeño gesto hacia arriba como buscando la respuesta en el cielo - ...en la espalda siento todo la responsabilidad que llevo de tener que cumplir y ser la mejor siempre"
Se produce un bello silencio, y la dejó habitando ese momento, para dirigirme al resto de los alumnos, y les preguntó:
"¿Se acuerdan la distinción entre Afirmaciones, que describen hechos, y las Declaraciones, que crean realidades?"
"Sí", respondieron.
"Entonces, ¿qué declaración o declaraciones profundas creen que ha hecho Alejandra en algún momento de su vida que la lleva a decir que siente en su espalda la carga y peso de responsabilidad de cumplir, y que a pesar de ser exitosa en todo lo que hace, no es feliz?"
Nadie se animó a contestar, y fue la misma Alejandra, como buena matea, quien al darse cuenta responde así, "Que haga lo que haga, nunca será suficiente, y que ni tampoco soy lo suficientemente buena".
"¿Y que quisieras que pasara?", le pregunté finalmente.
"¡Quisiera descansar!", exclamó.
Sin profundizar en cómo terminó esta conversación, lo que esto me permite (y que le permitió ver a los alumnos en dicha clase), es el poder que tienen las Declaraciones que consciente o inconscientemente hacemos y que pasan a "regir" nuestras vidas. En el caso de Alejandra, la declaración "Haga lo que haga nunca será suficiente", la ha atormentado toda su vida, y al estar potenciada por la declaración "Yo no soy lo suficientemente buena", la ha llevado a castigarse sin tregua alguna.
Con sus declaraciones, Alejandra había creado una realidad de insuficiencia y exigencia tortuosa, que ni siquiera daba espacio para perdonarse a sí misma ante el más mínimo e irrelevante error. Ese es el poder que tienen las declaraciones, que nos crean y dictan una realidad en la cual habitar y rigen nuestra forma de ser.
Posteriormente, Alejandra comenta que ya comprado y leído cuanto libro de Auto-Ayuda a encontrado y que le han recomendado, y aun así, ninguno le ha ayudado. "¡Claro, pues, si nunca es suficiente lectura para poder cambiar!", le exclamé, despertando una risa en ella y en sus compañeros.
"Alejandra, los libros y cualquier cosa de auto-ayuda no sirven por sí mismos en cuanto no tomes noción del SER que tú eres, y no cambies las declaraciones que has formulado", le indiqué.
Los libros son algo técnico, el desafío es ver cómo mi SER incorpora esto técnico, de modo de modificar y generar el cambio en mí, de dentro hacia afuera, y haciendo las declaraciones que me permitan llevar a una nueva realidad.
Y, algo muy importante, el mero hecho de hacer una declaración no "soluciona" el problema, pues éstas son válidas o inválidas dependiendo de la Autoridad para declararla que tenga quien la emita.
Entonces, en el caso de Alejandra, no bastará con hacer una nueva declaración, tendrá que volver a darse autoridad sobre sí misma de modo que ella misma valide, consciente o inconscientemente su propia Autoridad.
Luego, ¿cuáles son la declaraciones que están rigiendo y guíando tu vida? Si quieres hacer nuevas declaracione, ¿te sientes con la autoridad suficiente para validar las nuevas?
4 comentarios:
Mi estimadísimo...que buen tema, (y te felicito por la forma de redactar tan clara y amena)y no dejo de identificarme. Tal vez no haya llegado a ser una ejecutiva exitosa (por carrera) pero sí una Asistente cercano a lo exitoso. De todas maneras, siento y vivo lo mismo que Alejandra en cada área de mi vida y efectivamente ESTOY AGOTADA...el punto está en que tal como dices, necesito encontrar un punto en mi que valide una nueva declaración y eso es justamente en donde me enredo y confundo...siento de alguna manera, que me olvidé de qué camino tomar, cuál sería LA forma de re-validar-me..tus preguntas:"... ¿cuáles son la declaraciones que están rigiendo y guíando tu vida? Si quieres hacer nuevas declaracione, ¿te sientes con la autoridad suficiente para validar las nuevas?..." me confunden en una nebulosa que no sé cómo responder...
Mi estimadìsima Marisol,
Gracias por tu comentario y reflexiòn, y te felicito por lo de ser una Asistente exitosa (¿te das cuenta que efectivamente tienes el mismo problema que Alejandra, el no darte el permiso de SER EXITOSA, ya que pareciera que siempre falta algo? Asì que yo te saco lo de "cercano").
Entonces, si bien yo no puedo responder por ti, me parece que algunas declaraciones profundas que podrían estar rigiendo tu vida serían: "Nunca es suficiente" y "No puedo equivocarme".
Para la segunda pregunta, bueno, eso solo lo puedes juzgar tú.
La buena noticia, es que siempre se encuentra la respuesta, y si luega juzgas que sola no puedes llegar a ella, siempre puedes pedir ayuda... ...no eres una Super Héroe, sino una Mujer con mucho potencial. Los super heroes al final, si te das cuenta, siempre están solos.
Te mando un gran abrazo!!!
Gracias Yoyo, en verdad es grato ver que otros que han recorrido el mismo camino, hacen un "alto" en el de ellos, para dar una mano a otros que venimos detrás...se me abre un gran planteamiento, y mirando y leyendo, me encontré con "Boicoteador y Perfectito: Fundando mis juicios" y esos "personajes" también son parte de estas falsas validaciones que se fueron formando en alguna parte de mi camino...tengo tarea....casi que con lápiz y papel. Te abrazo.
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